

Últimamente me había animado mucho a leer.
He encontrado un rincón de la ciudad que está lleno de libros de pintura y arte.
Es de esos sitios tan míos,
a los que jamás llevaré a nadie.
Suelo ir una vez al día si encuentro tiempo,
y la semana pasada me encontré con un libro que hablaba sobre él.
Carnes retorcidas, café, música y yo.
Y hoy, me entero de su muerte...
No más triste o más trágica,
sino un simple, fin,
no más cuadros de Freud.
Era nieto de Sigmund Freud,
y como no, ya llevo bastante tiempo con un libro de Freud a mis espaldas.
"Ensayo sobre la sexualidad"...
Así que hoy, va por los Freud,
por el libro,
por los cuadros,
por él
porque murió pintándonos.

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