A pesar de todo, estoy perdida.
Y me doy cuenta cuando me quedo vagando sola por el mundo, buscando algo que no se lo que es.
Casi siempre acabo en el mismo sitio, mirando hacia el cielo pensando en todo lo que significa para mí, mi vida y este sitio. Me siento y me pregunto, ¿Qué buscas Amanda?
Y hay días en que no sé responder.

El ciclo aquí llega a su fin, ha llegado despacio. Se termina esta vida aquí, y aunque odié esto durante años, ahora pienso que nunca más me sentaré en este árbol y quiero llorar.
Se que en el fondo estoy perdida, porque me da miedo irme a vivir a casi el polo norte.
Hay días en los que pienso, ¿en qué estarías pensando cuando dijiste que sí....?
Y otros en que digo: Bien, dentro de unos meses estaré empezando desde cero.

Hay gente que me dice: tu estas loca, otra me dice: que suerte...

¿Habrá sido el azar, o habrá sido mi empeño de huir...?
Cuando me senté, en el despacho, me preguntaron: ¿A dónde quiere usted irse?
Y contesté: pues...¿ dónde teneis más lejos..?
- Finlandia.
- Pues ahí.

Fué así de facil, recuerdo que ese día no dormí nada, pensando en mi familia, y en todas las personas a las que quiero. En mi vida en general, en como iban a cambiar las cosas, en qué iba a ser de mi futuro.
Al día siguiente volví con ojeras al despacho, a punto de decir que no. Mi profesor, me dió una lección de vida, una charla sobre las personas valientes: "Son las que llegan lejos", me decía...
Ya ves, yo no sé si quiero llegar tan lejos... (pensaba...)

Mi nombre ya sale publicado, al lado de la palabra Finlandia.
Tan sencillo parece, y cuánto he luchado y he llorado para que ese nombre estuviese ahí colocado. El sueño de toda mi vida. Y me sigo sintiendo perdida, como buscando algo, entre gentes y entre calles.

En realidad, nadie nunca ha llegado a conocerme. Si alguien entrase aquí dentro, no podría soportar la presión. Por eso todos se van de mi lado, soy demasiado intensa. Por eso vivo sola, no aguanto que nadie cuestione mi intensidad.
Por eso me voy, por que tengo demasiadas cosas aquí dentro, una bomba a punto de explotar, a la que voy poniendo muros una y otra vez, esperando a que algún día mi interior deje de revelarse. Por eso quiero estar lejos cuando explote, para que se difumine con la nieve toda esta mierda, y ni siquiera lo note nadie...

Lo único que me apatece cuando me pierdo vagabunda entre la gente, es que alguien venga, me abrace y me diga: Ya está, Amanda, ya está... Yo sé cuanto has sufrido, pero ahora ya pasó todo...Vete a casa y descansa, aparca tus sentidos, tu corazón a un lado, y duerme en paz.

Pero eso no pasa, no hay consuelo que valga, ni persona que me conozca. Solo nos quedan el autoconsuelo y las autofelicitaciones.

1 comentario:

  1. Después de leerte y sin saber qué decirte realmente... por ahora solo diré que te dejo un abrazo y espero sientas el calor de alguna manera... A mí me gusta la intensidad con la que escribes y te expresas. Creo que es eso lo que te hace ser diferente, especial de cualquier otra persona; lo que me hace seguir leyéndote y manteniendo este contacto contigo. Arriba esos ánimos y no tengas miedo de estar perdida, sólo paciencia (?) y disfruta de tu sueño; disfruta de tu vida.

    ResponderEliminar